Si un hombre Maddox se enamora, ama siempre. ¿Pero qué si no te quiere, en primer lugar?

La sin-tonterías Liis Lindy es una agente del FBI. Decidió que solo estaría casada con su trabajo, rompe su compromiso y se transfiere de Chicago a los campos de oficinas en San Diego. Ama su escritorio. Está comprometida con su portátil. Sueña con promociones y con darse la mano con el director después de descifrar un caso imposible.

El Agente Especial a Cargo Thomas Maddox es arrogante, implacable y despiadado. Él se encarga de capturar a algunos de los criminales más difíciles del mundo, y es uno de los mejores que Bureau tiene para ofrecer. Aunque, por más vidas que ha salvado, hay una que está más allá de su alcance. Su hermano menor Travis se enfrenta a la pena de prisión por su participación en un incendio en un sótano que mató a docenas de estudiantes universitarios, y los medios de comunicación quieren una condena. La única salvación de Travis es la corbata inusual a la multitud. En un acuerdo de piedad para su hermano, Thomas se ha comprometido a contratar a Travis en el FBI.

Liis es obstinada, desafiante, y sin embargo de alguna manera suaviza los bordes ásperos de Thomas, convirtiéndola en la agente perfecta para que lo acompañe a la ceremonia. Haciéndose pasar por su pareja, tienen que viajar a la playa para la renovación de votos de Travis y Abby y darle la noticia, pero cuando terminan de fingir, ella se encuentra preguntándose si estaban fingiéndolo todo.

En la segunda entrega de la serie Maddox Brothers, experimenta a primera mano el misterioso mundo del elusivo Thomas Maddox, y lo bien que el amor puede ser cuando no eres el primero, sino el último.

Libro anterior